¿Has trabajado con un cliente que esperaba que le soluciones todo sin que él ponga de su parte y, encima, quedaba insatisfecho con tu trabajo?
Seguro en más de una ocasión también has tratado con clientes exaltados, sobreexigentes, inestables que te torturaban bombardeando tu bandeja de correo o llamando cuantas veces les sea posible.
Sin duda, todos hemos pasado por estas situaciones en nuestro camino empresarial. Ahora lo que debemos hacer es aprender de ellas e implementar mejores procesos para que no volvamos a caer en lo mismo.
¿Cómo evitar a los clientes difíciles?
1. No brindes tu mail personal
Debes crearte un mail profesional en el cual solo responderás tus mensajes durante el horario laboral. No respondas correos fuera de este horario. ¡Desconéctate! Si te mandan un mensaje a las 11 p.m. ni lo leas, responde al día siguiente luego de haber realizado tus actividades principales.
2. Configura un correo de autorrespuesta
Una buena opción cuando tu cliente envía correos en horarios no laborables, es que generes un correo de respuesta automática como “He recibido tu email” o “Te respondo en breve”, así lo mantendrás más tranquilo.
3. No brindes tu teléfono personal ni atiendas por WhatsApp
Si les das a tus clientes tu número personal por querer generar más empatía, lo único que ganarás es que te atormenten llamándote un fin de semana o cuando te encuentres de vacaciones. Lo que te recomendamos es tener un teléfono de empresa, que al igual que el mail corporativo, solo uses en horario laboral.
4. No respondas los mensajes de Facebook
En este punto nos referimos a tu Facebook personal. Si algún cliente o suscriptor te escribe a tu mensajería, no contestes. En tu página web ya tienes un formulario de contacto donde pueden realizar sus consultas.
5. Protege tu intimidad
No mezcles tu vida personal con el trabajo. Con esto nos referimos a que no debes brindar la dirección de tu casa y menos realizar reuniones en tu espacio personal. Si no cuentas con una oficina, puedes reunirte con tu cliente en un restaurante o un café conocido.
6. Cobra por adelantado
Asegúrate de no realizar un trabajo en vano. Si ofreces un servicio trata de cobrar por adelantado. De lo contrario, puedes pedir el 50% y luego ir cobrando la diferencia conforme vayas presentando los avances.
7. Firma contratos
Una forma de salvaguardar tu trabajo es mediante la firma de contrato. En éste debes enfatizar los plazos que tienen para realizar los cambios en el proyecto que estás elaborando para que luego no se excedan del límite.
8. Despide a tu cliente
Si tu cliente se vuelve muy intolerable puedes optar por esta última alternativa. Despedir a un cliente no suele ser tan complicado si le explicas de manera asertiva por qué no puedes seguir trabajando con él.
Con todo lo aprendido, cuéntanos acerca de tus clientes difíciles y coméntanos qué harás para que ya no pases por una situación tan estresante como esa.